jueves, 29 de octubre de 2009

Florentino Pérez: Debate en 1995 en Telemadrid



A la hora de valorar adecuadamente a Florentino Pérez, es conveniente tener un conocimiento lo más amplio posible en el tiempo de él y sus actos. Mucha gente que vive fuera de España, o mismamente fuera de Madrid, o que por su edad no han vivido ciertos acontecimientos, no la tiene, por lo que este texto contribuye a tapar esa carencia.

Antes de ganar las elecciones al Real Madrid, Florentino Pérez se presentó como candidato a las anteriores y las perdió, en 1995. En esa ocasión, hubo un debate en Telemadrid entre los tres candidatos (Florentino Pérez, Ramón Mendoza y otro cuyo nombre no recuerdo).

El tercer candidato tenía proyectos grandiosos que a simple vista parecían irrealizables y peligrosos. Hablaba de un "pool de bancos" para acometerlos, y daba miedo oirle. A lo mejor lo que proponía era una idea genial y brillante que habría relanzado al club, pero no lo vendía bien y asustó a la afición. Parecía mejor seguir la prudencia ante emprendimientos de este calibre. Mendoza le atacó con facilidad, acusándole de megalómano peligroso que iba a hundir al club en la ruina y que lo iba a hacer desaparecer. No es de extrañar que obtuviera muy pocos votos luego, en las elecciones.

Lo más interesante del debate aconteció entre Florentino Pérez y Ramón Mendoza. Florentino presumía de ser socio desde hacía décadas. Bueno, si tiene un carné que lo demuestra, no hay quien se lo discuta. Pero Florentino centraba su discurso en la economía. Mendoza que era muy listo, se dió cuenta, y vio que su punto débil era hablar de fútbol, y comenzó a atacarle por ahí. Y fue magistral, porque le dejó en evidencia.

En concreto, Mendoza se dió cuenta de que Florentino no era capaz siquiera de atacarle en algo que cualquier aficionado que siguiera mínimamente al equipo podía hacer: Acusarle de ciertos errores en la gestión deportiva graves, a la cabeza de los cuales estaba la destitución de Radomir Antic como entrenador cuando el equipo iba primero en la liga, para terminar perdiéndola con el Barcelona, error que Mendoza reconoció en su momento, al finalizar la temporada.

En ese debate, Mendoza dijo algo así como: "Yo he cometido algún que otro error grave y usted no es capaz de echármelo en cara, lo que demuestra que no sabe de fútbol y que no sigue al equipo". Y claro, el mensaje implícito de esta acusación es que el socio no puede votar a alguien que no sigue al club, y que no entiende de fútbol ni siquiera en las cosas más básicas, y lo que es peor, que no se ha molestado en seguir al equipo, (ni siquiera en asesorarse para ir a un debate en televisión).

Por supuesto, Mendoza no mencionó cuál o cuáles eran esos errores. Siendo la oposición la interesada en sacarlos a la luz y explotarlos en su beneficio, no iba a ser Mendoza tan torpe como para mencionarlos. Él simplemente reconoció que esos errores los había cometido y que existían, y esperó que Florentino demostrara su conocimiento de ellos. Cualquier aficionado que hubiera seguido el equipo lo habría hecho mejor que Florentino y los habría mencionado. Pero Florentino no pudo hacerlo porque no lo sabía, y quedó en ridículo. El que se presentaba como candidato a la presidencia del club, que decía que tenía una antigüedad como socio de décadas, demostró que en efecto, no seguía el fútbol y que se presentaba al cargo atraído más por el prestigio institucional, o quién sabe por qué motivo, más que por ser un aficionado real.

Florentino dió palos de ciego, hablando de la cantera, y Mendoza lo desbarató con facilidad, pues precisamente la cantera estaba produciendo grandes futbolistas, con lo que Florentino, en vez de salir de las arenas movedizas, se hundió más en ellas.

Así que la sensación que se nos quedó a los espectadores fue bastante amarga. Por un lado, el entonces presidente, con el que no estábamos conformes (luego ganó las elecciones). Pero la oposición era peor: Un chiflado hablando de un "pool de bancos" y un tipo que no sabía de fútbol y que no seguía al club. Lo peor fue saber que alguien podría haberle asesorado antes de acudir al debate sobre los errores de la gestión deportiva de Mendoza para no hacer el ridículo de esa manera en público, y no lo hizo. Si en todos sus años de socio y presentándose de candidato a la presidencia, Florentino estaba así de verde y de ignorante, ¿qué hacía pensar que iba a cambiar?. Nada. Y así fue su gestión deportiva como presidente: Fichar futbolistas superfamosos que mejoraron la herencia recibida, disfrutar de la inercia del pasado, pero que, al acabarse esta, mostró una gran carencia de jugadores de equipo. Un modelo erróneo.

Artículo relacionado: Florentino Pérez: Balance 2000-2006.

No hay comentarios: