jueves, 13 de mayo de 2010

Liga Europa: Cuando hay hambre, no hay pan duro

El Atlético de Madrid empezó la temporada jugando en la Liga de Campeones, y fue eliminado vergonzantemente, haciendo el ridículo, por lo que fue a parar a la Liga Europa, la antigua Copa de la UEFA a la que le han cambiado el nombre para hacerla más sofisticada, siguiendo esa tendencia de renombrar las cosas malas para aumentar el relumbrón aunque sólo sea en el nombre.

En semifinales, el Atlético de Madrid se encontró con el Liverpool, otro eliminado de la Liga de Campeones, que ha pagado cara durante toda la temporada la baja de Javi Alonso, traspasado al Real Madrid, y que en dichas semifinales hubo de sumar la baja de Fernando Torres por lesión. La consecuencia es que el Atlético de Madrid se clasificó para la final.

Y en la final jugaron contra el Fulham, un auténtico novato en finales europeas.

Tras ver el partido, la conclusión que he sacado es que dicho equipo inglés es un equipo bien malo. Sólo tiene una virtud: la fuerza física, la estatura, pero apenas algún recurso ofensivo de destacar. Su juego recuerda al de Alemania, pero con mucha menos calidad. El Atlético de Madrid tenía más virtudes en ataque, dominó el partido más tiempo que el rival, y terminó ganando cuando ya se acababa la segunda parte de la prórroga (2-1). Yo creo que todos los rivales del Real Madrid en Liga de Campeones han sido mejores que este Fulham.

Cuando hay hambre, no hay pan duro. Y el Atlético de Madrid ha pasado muuuucha hambre de títulos, y así, ahora que han conseguido un titulito menor y devaluadísimo como esta ridícula Liga Europa, este cacho de pan duro, lo celebran como si fueran campeones de Europa, jajajajaja. Y ya sale a relucir su prepotencia, presumiendo de que han ganado un título, (igual que los farseros sacaron la suya llamando títulos a esos apéndices de un partido llamados Supercopas), la prepotencia del mediocre, del débil, del inferior, del perdedor, del segundón. En definitiva, la prepotencia de los patéticos de Madrid.

Y sacan sus insultos contra el Real Madrid, demostrándonos a todos que su razón de existir no son ellos, sino nosotros. Ellos giran a nuestro alrededor, y son tan perdedores que hasta cuando ganan alguna cosilla tienen que acordarse de nosotros. Bueno, ellos y los farseros. Todos.

No hay comentarios: