Resultado: 1-1 = 1-1 + 0-0 (Benzemá y Ronalpiños (p.))
El Real Madrid ha repetido la alineación del último partido, el jugado contra el Getafe, sin Guti en la convocatoria y con Raúl de suplente, jugando Marcelo en el puesto de Cristiano y Arbeloa de defensa lateral izquierdo. La mejor alineación posible.
En la primera parte, el Real Madrid ha arrollado al Milán. Si el Madrid hubiera jugado así en el partido de ida, con estos jugadores titulares, habría ganado.
Fruto del empuje madridista llegó el gol a la media hora de juego. Gol de Benzemá tras un rechace a un tiro de Kaká tras una gran internada por el centro de este.
Pero el Milán resistió bien el empuje del Madrid, porque el Milán es superior al Madrid en defensa, en inteligencia táctica y en compenetración. De hecho, en estas cosas son el mejor o casi de los mejores equipos del mundo. Por eso sólo les metimos un gol en la primera parte.
Y las debilidades defensivas del Madrid le pasó factura con un ataque que terminó en penalty, riguroso en mi opinión pues fue involuntaria la mano de Pepe. El caso es que ese penalty se transformó en el gol del empate. Luego el árbitro le anuló un gol al Milán, de Pato.
En la segunda parte, el cansancio impidió que el Madrid mantuviera el gran nivel de la primera parte. El juego pasó a ser más lento, y ahí el dominio táctico y la compenetración del Milán les dió ventaja, pero no la suficiente para marcar gol.
Yo habría metido a Diente por Marcelo, pues ambos son muy parecidos en ataque, y el empuje del orco al estar descansado podría haber desnivelado el partido. Y a Rafael van der Vaart por Kaká, ya muy cansado. A Raúl por Higuaín o a Ruud por Higuaín.
A falta de 17 minutos entró Raúl y a falta de 8, Ruud van Nistelrooy. Raúl casi mete gol de un gran tiro, pero el portero lo despejó como pudo.
Con un partido ya lento por cansancio, o se saca a alguien que desequilibre descansado, como Diente, o se saca a tipos pillos, como Raul e Inzaghi. Los entrenadores, que son los que entienden, han preferido lo segundo. Quizá porque perder un balón en ataque obliga a los cansados que están detrás a hacer un esfuerzo extra que ya no pueden hacer. En el caso del Madrid, porque Raúl también ha hecho en la práctica de centrocampista ante la acumulación de contrarios defendiendo. Aunque para eso quizá mejor Van der Vaart.
Le ha venido bien al Madrid jugar contra el Milán. También le ha venido bien para chafar la ridícula prepotencia de tantos madridistas, denigrando al Milán por ser veteranos, como si eso importara mucho a estas alturas de la temporada. Eso y el gilipollismo del Madrid en el partido de ida es lo que hace que el balance total de puntos de los dos partidos haya sido negativo.
Pero considerando que ha servido para abrir los ojos a muchos sobre cómo tiene que jugar el equipo y quiénes tienen que jugar, para bajar la prepotencia e introducir humildad (en jugadores y aficionados), entonces ha sido positivo.
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